DECO LOW COST: PINTANDO CON CHALK PAINT DE ANNIE SLOAN

Hoy os quiero hablar acerca de la Chalk paint, una pintura que para mí fue el descubrimiento del 2013. No me emocionaba tanto con un descubrimiento de decoración y craft desde que conocí el washi tape. 

¿Y qué tiene de especial esta pintura? Pues que no necesita imprimación, ni lijar primero y que es capaz de pintar sobre casi cualquier superficie. ¡Una maravilla!

Ya os he contado alguna vez que me gusta reciclar los muebles antiguos y tratar de darles otro aire antes de tirarlos y comprar nuevos. Durante el año pasado pinté de blanco el interior de la puerta de entrada, las puertas de un armario empotrado y la librería del salón (dos capas de imprimación y tres de pintura). Así que creedme si os digo que ojala hubiera conocido antes la Chalk paint porque me hubiese ahorrado muchísimo trabajo.

Comencé a investigar sobre esta pintura y descubrí que la venden en una tienda de Zaragoza llamada Lalo's Recycling and Craft que está en la plaza de los Sitios. Así que me acerqué a ver los colores en directo y a que me explicaran si era posible llevar a cabo el proyecto que tenía en mente, ya que mi idea era pintar los muebles de la cocina sin lijarlos antes, ya que eran lacados. En la propia tienda hacen talleres para aprender a usarla pero yo no tenía tiempo para hacerlos. La gama de colores no es muy amplia pero son tonos preciosos con nombres tan sugerentes como el rosa antiguo, el cielo de verano o el azul escandinavo, colores delicados y elegantes que espero probar en un futuro. Como quería una cocina de estilo nórdico me decanté por un blanco. 

En la tienda me explicaron que limpiara bien toda la superficie a pintar con agua y jabón para eliminar todo rastro de grasa, que lo secara y después comenzara a pintar. Primero apliqué una capa con pincel siempre en el mismo sentido y una vez seca apliqué una segunda en sentido perpendicular, es decir, si primero la apliqué de arriba a abajo luego fue de izquierda a derecha. La pintura es bastante espesa y hay que remover de vez en cuando y acordarnos de tapar bien el bote para que no se seque. Una vez seca la segunda capa de los armarios, toca sellar la pintura con una cera para que dure más. También son dos capas pero la cera cunde muchísimo. Simplemente hay que coger cera con un trapo e ir aplicándola. Yo elegí una cera transparente pero también hay una cera que aporta un aspecto envejecido a los muebles. 

Ya sólo quedaba cambiar los tiradores de las puertas de los armarios así que fui a Ikea con las medidas y compré unos plateados de lineas rectas y sencillas. ¿Qué os parece el resultado?

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